domingo, 19 de agosto de 2007

La Bastarda División 250

La División Azul (División 250 de la Wehrmacht), denominada así por el color de las camisas utilizadas por los falangistas, fue un grupo de voluntarios enviados por el dictador Franco, el vencedor de una sangrienta guerra civil que mantendría bajo un sistema opresivo al pueblo español durante 40 largos años, para ayudar a la Alemania Nazi en su “lucha contra el bolchevismo” y su cruzada internacional contra el sionismo. De este modo, tomó parte en la denominada ‘Operación Barba roja’(la invasión de la URSS).

La unidad estuvo compuesta por voluntarios procedentes de las milicias de Falange, el estudiantado, los veteranos y encuadrada por oficiales de carrera que habían combatido en la Guerra Civil.

Tras un rápido avance por las bastísimas llanuras soviéticas, la División 250 llegó hasta Leningrado, la ciudad que dio origen a la Revolución Rusa de Lenin. Una ciudad estaba llena de civiles (más de 3.000.000 de habitantes, mayoritariamente refugiados) y opondría una férrea resistencia a la bestia invasora Nazi. Hitler, ante la perspectiva de tener que mantener a una población enemiga instruyó que se le sitiara y se dejara morir a la población por hambre y frío. El sitio duró casi 900 días desde 1941 hasta 1944, la población rusa sitiada fue sometida la más increíble lucha por la supervivencia, donde el agotamiento de los alimentos llevó a parte de la población a realizar actos de antropofagia y mercado negro.

Familias enteras murieron de frío y hambre en sus hogares, los orgullosos habitantes de esta ciudad cultural dieron cuenta desde palomas, gatos hasta ratas, la ciudad estuvo a punto de perecer si no hubiera sido que se estableció un corredor a través del congelado Lago Ladoga por donde llegaba una escuálida ayuda a los sitiados.

Para finales de octubre de 1941 la situación ya era desesperante. Si bien los defensores soviéticos al mando del Mariscal Georgi Zhukov mantenían a raya a los alemanes, los efectos del hambre ya se estaban sintiendo en la población. Esta empeoró al capturarse Tikvin, la ciudad rusa de donde salían los convoyes con provisiones a Leningrado. Miles de trabajadores murieron en la construcción de una nueva carretera, que no sirvió de mucho, porque Tikvin fue recuperada tres días después de terminarse la nueva vía. Finalmente, el 20 de noviembre de ese mismo año el llamado ‘Camino de la Vida’ fue construido a través de las frágiles capas de hielo del Ladoga, sin que esto significara que la falta de alimento en la ciudad acabara.

Además del hambre, la falta de combustible coincidió con uno de los peores inviernos que ha vivido esta ciudad, muriendo miles de civiles de frío.

Al inicio del ataque a Leningrado, previniendo un prolongado asedio, las autoridades disminuyeron las raciones alimenticias diarias a 600 gramos de pan para los obreros, 400 gramos para los empleados y 300 gramos para los niños y no trabajadores. Debido a la falta de adecuadas defensas aéreas, un monto considerable de granos y harina fue destruido el septiembre. Además no se tomó la previsión de clausurar los restaurantes, que derrocharon comida que sería necesitada urgentemente poco después.

El 12 de septiembre fue declarado que los granos y la carne sólo durarían 35 días, mientras que el azúcar duraría 60 días. De modo que las raciones fueron reducidas aún más: 500 gramos para los obreros, 300 para los niños y empleados, y 250 gramos para los no trabajadores. Como esto no era suficiente, la flotilla del Lago Ladoga envió provisiones, siendo la mayoría hundida por los cazas alemanes, sin embargo la hambruna obligó a los soviéticos a enviar buzos a rescatar lo que pudieran. Ante la falta de carne, se molieron 2 mil toneladas de tripas de cordero que fueron encontradas en los puertos. Además, el Instituto Científico de Leningrado creó una especie de harina sintética a base de conchas y caparazones, complementada con serrín. Esto no fue suficiente, y al final del año la población consumía el diez por ciento de las calorías indispensables, muriendo miles por malnutrición.

Debido a la falta de combustible, el transporte público desapareció, al mismo tiempo muchas fábricas cerraron. Solamente los edificios militares tenían derecho al uso de la energía, si bien de forma limitada. La desesperación de los habitantes para no morir congelados los obligó a quemar la biblioteca de la ciudad, de 200 años de antigüedad, marcando profundamente la memoria colectiva de, hasta entonces, la capital cultural de Rusia.

Después de la guerra fue encontrado el diario de una niña de 11 años, que narra de forma brutalmente simple, como uno por uno todos los miembros de su familia mueren de hambre, hasta que ella queda sola, aunque al final ella muere también. Dicho diario fue utilizado como evidencia por los aliados para juzgar a los militares alemanes encargados del cerco a Leningrado después de la guerra.

La División 250, que participo de forma activa en el sitio de esta ciudad, fue derrotada y aplastada por el ejercito rojo en la batalla de Krasny Bor, una localidad cercana a Leningrado, gracias a su derrota pudo ser liberada la ciudad y los supervivientes del cerco comenzaron a tener ilusión en un final de la guerra con el aplastamiento del Tercer Reich alemán. Los restos de la ya acabada División Azul fue apresada por el Ejercito Rojo, siendo deportados a los campos de prisioneros en Siberia. Aquellos que escaparon se unieron de nuevo al ejercito alemán aunque ya en otras divisiones, muchas de las cuales lucharon en la definitiva batalla de Berlín, ya en 1945.

Actualmente, muchos fascistas ven esta batalla de Krasny Bor como un “signo de heroicidad” ante las hordas comunistas, sionistas, etc … que intentaban “invadir” Europa … cuando en realidad no fue más que un baño de sangre en el que perecieron esos asesinos que permitieron que una ciudad entera, apestada de refugiados, etc … padeciese las peores calamidades. El revisionismo que pretenden llevar a cabo esta panda de asesinos es cuando menos indignante y patético.

La División Azul no fue más que un grupo de mercenarios al servicio del Nacional Socialismo y sus ideas asesinas e inhumanas.

No hay comentarios: